El Mindful Marketing o Marketing Consciente es una de las tendencias que serán claves en marketing digital durante 2020. Tal como su nombre lo indica, se relaciona directamente con el mindfulness y con cómo las audiencias van cambiando las razones que tienen para consumir un producto o servicio. Por supuesto que los conflictos a nivel social de cada país también tienen un impacto importante en esta corriente, haciendo que cada vez los usuarios se cuestionen más a quién le compran, por qué y cómo esa acción se alinea con sus valores.
¿De dónde parte?
Comienza desde el mindfulness, incluso si parece una dicotomía. Lo que este tipo de marketing consciente busca, es crear una relación más verdadera entre marca y cliente (y ojo: no sólo que parezca verdadera, sino que realmente lo sea). De esa forma, impulsa a las marcas a replantearse sus productos en relación a diferentes temas como el cambio climático, conflictos sociales y otros.
¿En qué se basa?
Se basa en el hecho de que el consumidor ha cambiado su mirada y sus razones para consumir. En la actualidad los consumidores tienen expectativas sobre las marcas que siguen: quieren verse reflejados en ellas, quieren poder tener una conexión emocional y también quieren que sus demandas sean escuchadas. Son más conscientes de las responsabilidades que pueden tener las empresas a nivel global para ayudar en temas ecológicos, por ejemplo.
De esa forma, ya no es tan relevante separar a tu target según hábitos de consumo. En cambio, se vuelve más relevante entender qué cuestionamientos tiene nuestro segmento y qué soluciones buscan.
¿Cómo entenderlo?
De partida, hay que comprender la intencionalidad de tu buyer persona. Entender por qué te elige y por qué podría dejar de hacerlo. En base a esos dos polos puedes determinar si es que los servicios o productos que prestas son relevantes y si la forma en la que lo comunicas es la correcta.
¿Cómo aplicarlo?
Es importante definir una estrategia de marketing con este concepto clave y todas las características de tu buyer persona. También es relevante recordar que en este modelo se privilegian las necesidades de tu público objetivo y el valor agregado de tu empresa o servicio por sobre hablar de tu propia empresa. Hablar de uno mismo pasó de moda: lo que la gente busca ahora es que podamos hablarles directamente sobre temas que les sean importante y ofrecerles soluciones que les hagan sentido.
Acá te dejamos cuatro propuestas que nos parecen acertadas:

1. Parte por ponerte en los zapatos de tus consumidores
Conócelos, piensa cómo ellos y podrás comprender el camino adecuado que te ayude a cumplir tus objetivos comerciales sin dejar a tus clientes de lado.
2. Plantéate acciones sociales
¿En qué cosas podría ayudar tu empresa? Quizás podrías optar por tomar medidas que te conviertan en una compañía que ahorra papel y apoya al medio ambiente. No lo pienses sólo como una acción publicitaria (aunque ciertamente ayudará a tu imagen).
3. Observa los conflictos, especialmente en RRSS, como oportunidades
En la era de la funa, entiende que más que un problema esto puede ser un espacio para escuchar a tus clientes y hacer cambios necesarios que aporten a la sociedad al mismo tiempo que te ayudan a retener clientes y aumentar tu cartera.
4. Presta atención a tus comunicaciones
Define la voz y el tono de tu marca para esta nueva era. Lo que digas, y cómo lo digas, será de vital importancia en cómo tus consumidores te perciban. Es posible vender sin vender: aplícalo a tu estrategia.
¿Estabas al tanto de esta estrategia de marketing? En digital el mundo cambia a la velocidad de la luz, por lo que es importante estar siempre informados y preparados para dar nuevos pasos.